Lo más importante en la vida es que lo más importante sea lo más importante. Stephen Covey
Tenía que comenzar el año 2021 con esta cita de Stephen Covey, aunque reconozco que supe de ella por Victor Küppers, que como en tantas otras ocasiones ha resultado inspirador en muchos aspectos de mi vida.
La vida, ese efímero tiempo que va desde que naces hasta que mueres, sin más, ese periodo en el que pasas más tiempo pensando en cosas banales y preocupándote por cosas que al final no te van a servir, o por las que no te tendrías que haber preocupado, y en cambio otras, a las que no prestaste atención, seguramente hasta que las perdiste.
Hoy está muy de moda que te digan que tienes que priorizar, lo escuchas a diario en el trabajo, seguramente también en la universidad o el instituto, es como una constante que se te mete en la cabeza, pero en realidad nunca sabes si actúas de la manera correcta o no cuando tomas decisiones.
Pero todo esto es más profundo, la vida es más profunda que unos estudios o un trabajo, pensar qué es lo que te hace feliz, qué es lo que realmente quieres hacer, en qué ocuparás tu tiempo, a quien se lo dedicarás o a qué, y tener que decidirlo siempre en base a esa idea tan utópica que es creer en la felicidad.
He tardado casi 40 años en darme cuenta que a mí lo que me hace feliz es mi familia, y también correr, escuchar música, bailar, cantar, y porque no decirlo, leer y escribir sobre temas como estos, pero siempre sin más pretensión que esa satisfacción personal, sin pensar en nada más, con el único beneficio de esbozar una sonrisa cuando lo hagas, y quizá ahí esté la respuesta, si lo que haces te hace sonreír, es que vas por buen camino y estás eligiendo bien.